diciembre 4, 2024

Liberto Beltrán se viste de héroe y precipita la primera derrota del Ibiza esta temporada

Criado, siendo perseguido por Pablo Ganet/ Foto: UD Ibiza
Criado, siendo perseguido por Pablo Ganet/ Foto: UD Ibiza

El Mérida se hace fuerte en casa y le arrebata el invicto a un Ibiza con buen juego colectivo pero sin lo más fundamental del fútbol, los goles.

Un duelo en la parte alta de la tabla siempre suscita interés, y si es entre un serio contendiente al ascenso como el Ibiza y el equipo cuyo ataque está liderado por el actual máximo goleador de la categoría, Javi Eslava, mucho más. Ardua tarea para ambos, por parte de los romanos porque jamás han conseguido ganar ante los celestes, y por parte de los insulares por el mal momento que atraviesa su referencia ofensiva, Pau Ferrer, aún inédito esta temporada.

Minutos de tanteo al comienzo del encuentro, pero con un Ibiza mucho más asentado en el verde del Estadio Romano José Fouto. Juego por dentro, tercer hombre para sacar la bola desde atrás y mucha precisión en la salida de balón marcaron la primera mitad de un partido al que el Mérida pareció no salir de no ser por el hombre de la primera mitad, Mario Climent.

El lateral alicantino formó una extraordinaria pareja de baile con su extremo, Doncel, para convertirse en las principales referencias de un ataque emeritense con pocos recursos pero con asociaciones de mucha calidad y disparos desde la frontal que Ramón Juan supo controlar. Dinámica habitual en estos partidos: el Ibiza controla pero no llega mientras el Mérida, con un juego muy directo se asoma con peligro con encadenar tres pases consecutivos.

La batalla de Pau Ferrer con Bonaque y Pareja comenzó por fin a dar sus frutos y logró descargar de espaldas a portería para Gallar y Naranjo. Incluso pudo adelantar a los ibicencos en un par de disparos potentísimos que de no ser por los bloqueos de la zaga blanquinegra, habrían acabado en el fondo de la portería local. El encuentro cogía ritmo por momentos; el control del Ibiza era cada vez mayor y las llegadas de Climent, Beneit y un Eslava casi desaparecido, cada vez más frecuentes. 

La media hora final se convirtió en un toma y daca constante. Primero el Mérida con un disparo de Roncel desde el sector izquierdo tras una recuperación ‘de listo’ de Busi. Más tarde, un disparo lejano de Zarzana, que renovó el ataque celeste y que hubiera supuesto el gol de la jornada. Ambas escuadras parecían bajar los brazos acusando el desgaste físico y los pocos cambios de Josep Lluís Martí y de Sergi Guilló, hasta que Liberto Beltrán, figurante hasta el descuento, decidió enfundarse la capa y vestirse de héroe.

Doncel, más listo que nadie, robó la pelota y se la sirvió a un Beltrán solo en la esquina del área. ¿Se acuerdan de la jugada tipo de Robben? Todo el mundo sabía lo que iba a hacer: ligera carrera hacia dentro para acomodar el balón a la zurda y golpeo imparable a la escuadra alejada del portero. Pues eso mismo hizo Beltrán para poner el 1-0 y desatar la locura entre los más de 3.000 aficionados romanos que se habían dado cita en el José Fouto.

Victoria que aúpa de nuevo al Mérida y da su primera dosis de realidad al Ibiza, que cae por primera vez esta temporada, acusando una evidente falta de gol. Puede que los ibicencos duerman hoy en la zona noble de la clasificación, pero solo el Yeclano ha anotado menos goles que ellos.